Ictus ocurre cuando el suministro de oxígeno al cerebro se interrumpe ya sea debido a un bloqueo (Ictus isquémico) o daño (Ictus hemorrágico) en el
vaso sanguíneo. El mini ictus o ataque isquémico transitorio (Ictus TIA) sucede cuando una parte del
cerebro no recibe suministro de sangre durante un corto período de tiempo. Cada minuto que el cerebro se queda sin oxígeno, mueren casi dos millones de células cerebrales aumentando la gravedad de la discapacidad y, finalmente, llevando a la muerte.